por el pastor Paul M. Sadler
La Sociedad Bíblica Bereana (Berean Bible Society) publica diariamente en su sitio web artículos devocionales con el nombre Two Minutes with the Bible. En 2T15, publicamos traducciones al español de dichos artículos, con la finalidad de poner el mensaje de la gracia de Dios al alcance de los hermanos en Cristo de habla hispana. Sea de bendición para su vida.
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Cuando Zorobabel puso los cimientos del segundo templo después del cautiverio babilónico, muchos de sus compatriotas vieron el esfuerzo con desprecio, creyendo que nunca llegaría a nada. El profeta Zacarías respondió a estas críticas de la siguiente manera: “Los que menospreciaron el día de las pequeñeces se alegrarán” (Zacarías 4:8-10). Zacarías recordó al pueblo que aunque la obra les parecía insignificante, no debían despreciarla porque la mano del Señor estaba con Zorobabel.
Cuando Gedeón reunió un gran ejército para presentar batalla a los madianitas, de quienes se decía que eran como saltamontes sobre la tierra, el Señor redujo el número de las fuerzas de Gedeón a apenas trescientos. A lo largo de las Escrituras hay un tema recurrente de que Dios está mucho más interesado en la calidad que en la cantidad. Cuanto menor es el número, mayor es la gloria, el honor y la adoración que recibe, lo cual se demuestra claramente en la historia de los trescientos de Gedeón.
A medida que avanzamos en el corredor del tiempo, aunque pueda parecer que El Movimiento de la Gracia es pequeño e insignificante a los ojos de nuestros críticos denominacionales, deberían tener mucho cuidado de no despreciar el día de las pequeñeces. Es cierto que somos pequeños en comparación con las mega iglesias de nuestros días que a menudo nos consideran ciudadanos del cielo de segunda clase. Sin embargo, justo lo opuesto es cierto si aplicamos el principio anterior del pasado. Para aquellos que nunca tomaron en serio el Mensaje de la Gracia, el Señor, en el Tribunal de Cristo, reconocerá a todos aquellos que voluntariamente defendieron el apostolado y el mensaje de Pablo para alabanza de Su gloria.
Así que nunca debemos desanimarnos por ser pequeños en número, porque Dios nos ha honrado con una comprensión de la Palabra correctamente separada. Pero esto no significa que debamos pensar demasiado de nosotros mismos, ya que tenemos la responsabilidad dada por Dios de hacer que todos los hombres vean cuál es la dispensación del Misterio. Y es esencial que llevemos a cabo este encargo hablando la verdad en amor (Efesios 4:15).
Aunque nos regocijamos de que se predique a Cristo en los círculos denominacionales, en su mayor parte, se han apartado de la verdad del Mensaje de la Gracia. Con esto en mente, ¿puedo pedirte que te unas a nosotros en oración para que haya un último gran despertar de nuestros hermanos denominacionales al evangelio de Pablo antes de que seamos llamados a la gloria? Recuerda, Dios es capaz de “hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros”.
Al lector (por Berean Bible Society): Algunos de nuestros artículos de Dos minutos fueron escritos hace años por el pastor C. R. Stam para publicarse en periódicos. Cuando muchos de estos artículos se compilaron posteriormente en forma de libro, el pastor Stam escribió esta palabra de explicación en el prefacio: "Hay que tener en cuenta que la columna del periódico, Dos minutos con la Biblia, se publica desde hace muchos años, por lo que los acontecimientos locales, nacionales e internacionales se discuten como si hubieran ocurrido recientemente. En lugar de reescribir o fechar estos artículos, los hemos dejado tal como estaban cuando se publicaron por primera vez. Esto, nos pareció, añadiría interés, especialmente porque nuestros lectores saben que aparecieron por primera vez como artículos de periódico". A esto añadiríamos que lo mismo ocurre con los artículos escritos por otros que seguimos añadiendo, periódicamente, a la biblioteca de Dos minutos. Esperamos que esté de acuerdo en que, aunque algunas de las referencias de estos artículos son de hace tiempo, las verdades espirituales que enseñan son atemporales.
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